El Periodista Empresa (CPD Huesca 2009 / 1)

EL PERIODISTA EMPRESA

Es probable que lo expuesto en la primera mesa del congreso de Huesca sea lo más importante para considerar dentro del corto plazo. Los estudiantes de periodismo quedamos asombrados ante el coraje y el valor de estos 3 periodistas, ya sea por su manera de comunicar situaciones reales sin dramatismos desmesurados y por el sacrificio constante que realizan en una profesión muy afectada por la actual crisis económica. Andrés Izaguirre, David Beriain y Sergio Caro contaron sus experiencias de forma amena, directa. Es probable que muchos de nosotros cuando estemos en redacciones o en lugares remotos cubriendo desastres y guerras recordemos sus palabras. Julian Barnes decía que la primera vez en donde se decidió ser un escritor fue a los 26 años cuando Borges visitó su universidad y dio una charla. Algo parecido me pasa ahora al escuchar a estos 3 periodistas en Huesca.

El arranque lo dio Andrés Izaguirre con una frase bastante demoledora “El talento se paga mal”. Reconoció mejoras pero no tuvo problemas para señalar la precaria situación de los Freelance. Esta figura ya existía en los medios tradicionales, pero en la actualidad están aumentando al mismo tiempo que las adversidades a las que se enfrentan. Para Izaguirre es crucial viajar y contar sus experiencias, para él, el Tour de France es su metáfora, su acervo literario. Se definió como un destajista, una persona que le gusta trabajar a destajo, llevar una vida emocionante, ya sea trabajando en casa y poder programar sus horarios. Para él no es baladí ser un destajista. Decidió ser free-lance para programar el tiempo como quiere. Otra cosa que subrayó de esta disponibilidad es que mientras mayor sea el tiempo dedicado al periodismo, es mucho mejor su calidad. Situación que en algunos casos, no se consigue hacer en los medios tradicionales. Dentro de sus experiencias significativas, contó su travesía a Groenlandia, donde vivió como uno de los miembros de los cazadores de focas con los que se contactó. Llego como uno cualquiera y de a poco empezó a compartir los hábitos de estos, aprendió algo del oficio. Finalmente mencionó una célebre frase de Kapucinsky : “ Considero que no debo escribir sobre personas si no he vivido una parte como ellas”. Además, señaló que el mejor periodismo se da en la calle, “no bastan con las fuentes, hay que mover el culo”, añadió.

David Beriain, por su parte, va en busca de personajes que se encuentran en situaciones límite. Montó un blog mientras trabajaba en ADN, ya que le daba la posibilidad de contar sus historias en un formato que no impedía la extensión del texto, como sucede regularmente en la prensa escrita. Él quiso poner su empeño en historias geopolíticas, lo que el definió como “llevar al lector ahí, al lugar”. En 2002, llegó a Afganistán, donde se encontró con muchos muros para realizar su labor periodística. Uno de ellos fue la escasez de tiempo, no llegaba a contar lo que quería contar, “En una guerra hay muchas historias que contar, conseguir mayor temperatura, centrándose en pocos aspectos”, sostuvo. Otro problema era la desaparición paulatina de “los caza-noticias”, una figura de periodista que estaba desapareciendo del medio periodístico. No era prudente depender del British news. Una de sus momentos de mayor tensión periodística fue el encuentro con las farcs en Colombia, las dificultades de encontrarse con el líder, el no saber si eran confiables los individuos que lo guiaron al corazón de la guerrilla. Dentro de los problemas económicos que debe sufrir un Freelance es negociar el dinero con los editores. Aconsejó que es mejor negociar el dinero antes de partir al lugar para realizar la cobertura. Volver a la redacción siempre podía ser un problema. Beriain fue premiado con el José manuel Porquet, aclamado por una multitud de jóvenes aspirantes a periodistas, embelesados e impactados por su experiencia en guerras y conflictos.

Sergio Caro, reportero gráfico, ha acompañado a Beriain en algunas de sus travesías por el mundo. Fue de muy pocas palabras en su turno. El obtuvo el premio Ortega y Gasset por una fotografía de un inmigrante en la valla de Ceuta. Señaló que el pretende con sus fotografías “ayudar a los periodistas a contar sus historias”. Respecto a formato multimedia, agregó que ayuda al poder de los recursos gráficos, de esta manera, la tecnología debe estar al servicio de la historia.

Tres visiones interesantísimas de un tipo de periodista que aún es un personaje bastante escaso en los medios de comunicación, pero que podría ser determinante su función dentro de los próximos años.

Hechos y opinión (diferencias) en Periodismo Práctico

» Los hechos no tienen ojos. Uno debe
sorprenderlos como sorprende un árbol
al observar sus (¿diré?)
facetas de copiocidad».

Charles Tomlinson

¿Que hacer con los hechos y opiniones?

Alan Finkielkraut, en el país: «Yo comparto la idea de Hannah Arendt de que no existe libertad de opinión si no se sabe mantener la diferencia entre hechos y opiniones. La libertad de opinión son discursos distintos sobre un mismo relato, no una infinidad de relatos sobre un mismo hecho». Arendt, en su Visita a Alemania, denunciaba con particular belleza y virulencia una de las agresiones más elementales a la razón: La confusión entre hechos y opiniones. En ese magnifico reportaje cuenta la sorpresa que le causan aquellos alemanes que pretenden que el inicio de la segunda guerra no fue responsabilidad de Hitler, y la reacción que muestran esos mismos alemanes cuando les reprocha sus mentiras. Vienen a decirle a Arendt, conciliadores: ah, bien, cada uno de tiene su opinión. La fundamental distinción que hace Arendt es que el hecho de que Hitler invadiera Polonia no es materia opinable, y señala este relativismo nihilista frente a los hechos como una herencia del régimen Nazi. El desprecio por la verdad y la inutilidad del esfuerzo, vivamente representados en nuestro periodismo, también son, a mi juicio, las principales herencias del franquismo, y están mucho más vinculadas entre sí de lo que parece. Cuando un medio de comunicación prima la cualidad adhesiva de las opiniones por encima de su calidad técnica está empobreciéndose; pero sobre todo está lanzando un mensaje intelectual muy peligroso: el de que, en realidad, todas las opiniones son adhesiones y que solo se trata de elegir por qué lado de la cinta pegan. El momento en el que le aseguraron a Arendt que la guerra la empezaron los rusos: «Normalmente uno no va por ahí arrrastrando siempre obras de consulta». Lo cierto es que ya sí. Ahora sólo falta que los tertulianos aprendan a manejar internet a la velocidad de su atrevimiento.

Extraído de Periodismo Práctico, de Arcadi Espada (Espasa, 2008).