América latina: ¿Escondida o visible?
Para Estados Unidos y Europa, pareciera ser que América latina no es una prioridad estratégica. La vigilancia al mundo islámico o las flamantes potencias como China e India parecen ser más importantes. Al no padecer el subdesarrollo de África ni estar a la vanguardia del progreso, el interés por Latinoamérica pareciera decrecer, salvo por las estrafalarias apariciones de Hugo Chávez y ahora esta actual epidemia de la gripe A/ H1N1, llamada hasta hace poco porcina, inicialmente surgida en México. Tal situación debería ser revisada, teniendo en cuenta que es la tercera zona democrática en el mundo, después de Estados Unidos y Europa. Los lastres que tiene la región en aspectos sociales y económicos sumado a la dificultad que tienen las naciones del sur para poder lograr con eficacia órganos institucionales a nivel continental mantienen la duda por la evolución en la región y hacen poco probable una importante mejoría en el mediano plazo. Dentro de las opiniones más optimistas está la de Michael Reid, destacado periodista encargado de la sección de las Américas en el semanal británico The Economist. Su postura es bastante positiva frente al futuro de la región, salvo por un factor que según él es un retroceso significativo: El populismo en la región signado por Chávez.
Reid publicó en 2008 un interesantísimo ensayo: Forgotten Continent: The Battle for Latin America’s soul, editado por Yale University Press. Pronto a salir su traducción al español. El libro analiza cuestiones clave que hacen que nos interroguemos por esta aparente invisibilidad de América Latina en el contexto mundial. El libro va desde 1810 hasta el presente, revisando arduamente las teorías sobre el origen del subdesarrollo y explicando la dualidad que domina actualmente a la región, el populismo y cierto afán de reformas. Jorge Volpi se preguntaba hipotéticamente en una crónica aparecida en Babelia sobre si Barack Obama quisiera regalarle este libro a Chávez como respuesta al libro que recibió de este durante la última cumbre de las Américas en Trinidad y Tobago: Las venas abiertas de América Latina, de Eduardo Galeano. Un auténtico clásico de la intelectualidad de izquierda latinoamericana, que cuenta con 70 ediciones en español y traducido a una decena de idiomas. Las direcciones del libro (Reid en su forgotten continente crítica ferozmente las tesis de Galeano) pueden encontrar diversas interpretaciones, pero lo que está fuera de discusión es la vehemencia de su prosa y calidad literaria. El autor uruguayo, que siempre se ha caracterizado por formular con eficacia una crítica visión de la realidad, también ha declarado en sus últimas entrevistas que ve cambios significativos en la región, poniendo de ejemplo los casos de Brasil, Uruguay y Chile.
Tanto las tesis de Reid y Galeano comparten respirar estos nuevos aires de cambio. Una noticia importante referida a la situación limítrofe tuvo una salida feliz. El acuerdo de Bolivia y Paraguay respecto a sus límites territoriales, teniendo a Argentina como árbitro, es un importante avance en esta cuestión, teniendo en cuenta las diferentes procedencias ideológicas de los mandatarios de estas tres regiones. Volpi destacaba además en esa crónica que Chávez siempre en cumbres internacionales tiene poco afortunadas intervenciones, pero el obsequio a Obama, el libro de Galeano ha sido algo inteligente y que supone un giro estratégico de importancia. Pese a esto, y es en lo que insiste Reid en su forgotten continent, la actitud chavista y la de los países afines, situados muchas veces como un eje, puede ser el gran retroceso al cambio que necesita Latinoamérica, ya que la prioridad de este autoritarismo tiene diferentes prioridades respecto a otros países de la región. La estabilidad del gobierno chavista depende casi exclusivamente del precio del petróleo y se suman los tremendos problemas de libertad de expresión que vive la prensa venezolana y la gran inestabilidad social. Para el periodista británico, Caracas es la capital más violenta de la región y su actual presidente es un populista hostil a la comunidad internacional. Además, pese al apoyo de países como Bolivia, Ecuador y Nicaragua (para Reid sería sólo por su interés en el petróleo venezolano) muchos países están muy alejados de las ideas chavistas y existe un problema importante con Colombia ya que sus relaciones diplomáticas se encuentran en alta tensión. La opinión de Reid frente al fenómeno chavista es bastante compartido por los analistas internacionales latinoamericanos, pero el periodista de The economic tampoco esconde demasiado su ideología, bastante cargada de tradición anglosajona liberal. El camino de las reformas es el único posible para iniciar el giro histórico. La última cumbre dejó claro que Estados Unidos ya no puede ejercer el papel de padre despectivo o celoso, rol que viene desarrollando desde la doctrina Monroy, ya que China y Rusia están teniendo intensas relaciones económicas en la región. Lo sucedido en la V Cumbre de las Américas es prueba de ello, para el académico argentino Juan Gabriel Tokatlian, en ella han culminado tres procesos históricos distintos, el primero es el rol predominante de Estados Unidos en la región, el fin a la vieja guerra fría que se vive en américa latina y el fracaso por establecer de un área de libre comercio americana (ALCA).
Las transformaciones reformistas, que están vinculadas a los crecimientos sostenidos no están en la órbita populista. El mayor protagonismo de Brasil en la zona, que está mostrando una decidida competencia con Venezuela por la cuestión energética, esta cambiando paulatinamente la historia entre las relaciones de los países latinoamericanos. Brasil integra el grupo de las potencias emergentes Bric (Junto a Rusia, Irán y China) con esta última, está mintiendo importante relaciones, mucho más urgentes quizás que las que mantiene con Estados Unidos, según lo expresado por su actual ministro de Justicia en una reciente entevista. A pesar de lo anterior, es imposible hablar hoy de dos bloques antagónicos que rivalicen entre sí. El caso chileno, en el que también existen muchas coincidencias en los planteamientos de Reid y Galeano, también ha demostrado ser bastante fructífero. Para Reid, Chile ha logrado ser un gran éxito histórico en la región, el país que ha logrado un mayor crecimiento económico sostenido, iniciado desde la caída de Pinochet. El país austral es el más seguro en términos de seguridad ciudadana en la región y el ahorro de los beneficios aportados durantes años de bonanza por el cobre (uno de sus mayores ingresos económicos) lo está preparando mejor para enfrentar la crisis. México también ha logrado importantísimos avances en reformas institucionales, pero sus problemas con el narcotráfico y la violencia social todavía no permiten que el país consiga una estabilidad apropiada.
Cómo se ve, América latina se debate entre la visibilidad y la oscuridad. Jean-François Fogel se preguntaba recientemente en su blog sobre la manera de romper la distancia entre América Latina y Estados Unidos, respecto a la reciente cumbre. La administración Obama sabe que deberá preguntar e interesarse más por sus vecinos sureños, mantener importantes relaciones con México, Brasil, Argentina y Chile. Y saber entenderse con Cuba, Venezuela, Bolivia, Ecuador y Nicaragua. Interesante sería saber lo que diría Obama luego de una atenta lectura a Las venas abiertas de América Latina, saber si también cree Obama que sus vecinos del sur conforman un continente olvidado. E imaginarse a Obama leyendo el canto general de Neruda, El libro de Manuel de Cortázar o Conversaciones en la catedral de Vargas Llosa. Habrá que imaginarlo estudiando la visibilidad en el contexto mundial del continente. Quién sabe, quizás lo imaginaremos como al Sísifo de Camus: contento. Los grandes argumentos de cada parte deben ser estudiados, luego de lo sucedido en Trinidad y Tobago, ambas partes saben que comienza una nueva era en sus relaciones, y que debe ser mejor que la anterior.
mayo 19, 2009 a 6:06 pm
Si España todavía está dividida por una guerra sucedida hace 70 años, si en Estados Unidos todavía existe una fuerte división entre unionistas y confederados, ¿cómo va a cambiar la mentalidad hacia América del Sur? Por mis experiencias y contactos personales, Europa (no solo España) tiene la visión de América del Sur como patio de recreo, como playas y niños que piden limosna. Creo que cada ciudadano debería leer tanto a Reid como a Galeano, yo los tengo en mi lista. Me gusta este sitio, creo que lo he descubierto demasiado tarde. Un saludo